Chao
Me he sentido muy mal al leer esta noticia. Quizás porque Iñaki era el hermano de un compañero de clase. Quizás porque he sido incapaz de continuar con la tradición montañera de mi abuelo. Quizás porque todavía repito en el metro las sentencias que mi abuelo nos enseñaba mientras subíamos montes los fines de semana. Quizás. Pero intuyo que hay otras razones que no consigo explicar. Mientras las descubro recuerdo cómo su hermano nos contaba que disparaban juntos flechas a los rodapiés de su casa con un arco que él había traído de alguna expedición lejana. Chao, Iñaki.
2 comentarios
Ander -
eresfea -
Me emocinan los esfuerzos sobrehumanos de esos montañeros que han sufrido a su alrededor...
(La ONU deberían formarla sólo montañeros).